La primera vez que escuché a Cigüeña fue hace unos meses en el ya legendario Festunizer, y el flechazo fue instantáneo. Dos tipos, no precisamente unos púberes, tocando guitarra y batería con una intensidad memorable, pero con cierta elegancia. Algo así como un mamporro envuelto en terciopelo. Recuerdo que entré al Magazine a mitad de «Tormenta» y se me quedó grabada a fuego, cosa harto difícil por lo ajetreado del día (y por mi memoria de pez).
Cigüeña es, pues, la suma de Unai (guitarra y voz) y Martín (batería), valencianos de adopción y nacimiento, respectivamente. Cuentan desde 2012 con un álbum en la calle, homónimo, al que pronto se añadirá Neptuno, que acaban de grabar con Pablo Peiró (Betunizer) en los estudios Sountess. Por cierto, buena racha de producciones llevan los estudios de Sedaví: Cuello, Morenas, las Carmonas, Negro, Beginend…
Volvemos al todavía único disco de Cigüeña, que me voy por las ramas: es una maravilla. Una entrañable salvajada. Uno de los álbumes que más me ha impresionado en estos últimos años. Diez canciones en 27 minutos de energía, emoción, tensión, cambios de ritmo y una intensidad difícil de relatar. Palabras mayores vienen a la cabeza al buscarles parecidos: los Hüsker Dü del New Day Rising, los Jawbreaker del Bivouac, los primeros Superchunk… leed este texto de La Cúpula del Trueno (creo que es de Manel Peña): todas las referencias son brutales y coherentes. La voz de Unai puede costarle un poco a los recién llegados, pero pronto se hace uno a ella. De alguna manera recuerda a la de Mac McCaughan, de los ya mencionados Superchunk.
Joder, bajaos el disco de su bandcamp, ya que lo han editado con licencia Creative Commons y os sale gratis. Disfrutadlo. Ponedlo en el coche, en la ducha, para dormir, para despertaros, para cocinar. Y este sábado 1 de marzo id a verlos al Pub Darkness, en Sedaví, pues tocan a las 20:00 con Césped de Verdad, otro dúo valenciano al que seguir la pista.
Tienen un directo fantástico, muy agradecido y cañero, pero sobre todo, y ya voy por la tercera mención, intenso de narices. Unai no para de moverse mientras se pega al micrófono para desgañitarse, cosa que aprecio en gran medida, a la manera de Artur Estrada con Aina o Brendan Kelly (Lawrence Arms). Supongo que alternarán temas del primer disco y del prometedor Neptuno, como hicieron en el conciertazo que dieron en la Residencia el pasado diciembre junto a Perro y Nueva Vulcano. No os lo perdáis.
Bandcamp de Cigüeña // Facebook
Jorge
Pero le gustan más aún Bruce Willis y el morro bien frito.
Gos, manta, faena fuig!
jorge@sepiavlc.com
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